El pequeño patinegro

Chorlitejo Patinegro. Charadrius alexandrinus. Kentish plover.

Lo que se preveía como una mañana desastrosa, resulto ser todo lo contrario. Llegamos a un lugar que solemos frecuentar y cual fue nuestra sorpresa que la laguna estaba completamente seca. Decidimos probar en otro sitio que conociamos y nos pillaba realtivamente cerca.
Ya había amanecido, todo eran prisas y no veíamos nada a nuestro alrededor, todo era esperar. De repente aparecierón un par de pollos de chorlitejo patinegro, de unos 8 cm de altura, eran rápidos y precavidos. Al principio nos pasabán demasiado lejos, pero con el paso de la mañana se acercarón lo suficiente para poder fotografiarlos. No cabe duda de que la madre estaba muy pendiente de ellos, su vigilancia era constante y a cualquier otro ejemplar que pasaba por su alrededor, los echaba automáticamente.
Fue una mañana entretenida con estos pequeños, cada uno iba por su lado, eran auténticas balas al caminar, apenas se le veían las patas y en esos pequeños instantes que parabán, era el momento oportuno para retratarlos. Resultaba curioso ver como tenian el cuello completamente desplumado, parecian bolitas de algodón con motas
Aquí dejo una pequeña serie de esa mañana, de estas pequeñas aves que hicierón nuestra delicia.









Espero que esta pequeña serie haya sido de vuestro agrado.
Un saludo y hasta la próxima.

Después de la tormenta

Sapo Corredor. Epidalea calamita. Natterjack toad.

Subiendo a una de las cumbres más bonitas de la sierra de Madrid, cayó una buena tormenta en un día que aparentemente iba a ser soleado con alguna nube, pero resulto todo lo conrario. Una vez que amainó, era el momento para hacer algún paisaje y para mi sorpresa apareció este pequeño sapillo entre la maleza, a lo cual era el momento oportuno para hacerle algún retrato, pocos fuerón para no molestar al pequeño sapo.
Una especie que puede habitar en diferentes hábitats, siempre que haya agua alrededor. De unos 6-8 cm de longitud, de cuerpo rechoncho y verrugoso, color verdoso o marrón y cabeza ancha y hocico redondo. Me llamo la atención esos ojos grandes que tiene, bien bonitos dicho sea de paso. Al contrario que otros sapos, este anda y corre más que pegar saltos.
Una bonita experiencia con este pequeño anuro, el instante fue breve, pero bien mereció la pena, una vez pasada la tormenta.





Espero que haya gustado esta pequeña serie del sapo corredor.
Un saludo y hasta la próxima.